Por más de 40 años, miles de personas han pasado frente al avión de la plazoleta del aeropuerto neuquino, sin saber mucho acerca de su historia. El mismo es un Gloster Meteor de fabricación británica y es uno de los aviones más importantes de la historia de la aviación argentina y mundial.
Los Glosters fueron los primeros aviones caza/intercepción a reacción (jet) de los aliados durante la IIWW, siendo la respuesta tecnológica al “terror de los cielos alemán” el Messerschmitt Me-262. Ambos aviones a chorro –tal es el significado de jet- cambiaron la forma de volar ya que desde su aparición se alcanzaron velocidades inéditas enviando casi al desuso a los demás aviones caza/intercepción de la época. Algunos creen que su invención –de los jets- fue una revolución tecnológica solo equiparable con la misma invención del avión. El 1° vuelo de un Gloster se logró en 1943 y un año más tarde ya eran la joya –si es que se puede decir así a un arma- de la Real Fuerza Aérea Británica (RAF) y la más temida por la Luftwaffe nazi.
Finalizada la contienda muy pocos países en el mundo tenían esta tecnología de vanguardia, el nuestro tuvo acceso a ella debido a una doble situación: Gran Bretaña era un gran acreedor Argentino, al tiempo que se nos visualizaba como eventuales aliados contra la entonces amenaza comunista. De allí que, se nos vendió 100 Glosters Meteors MK IV (50 cero horas –nuevos- y 50 usados) lo que catapultó a la Argentina como una potencia mundial en aviación militar. Juan Perón los destinó exclusivamente a la fuerza armada más joven de la Nación: La Fuerza Aérea Argentina (FAA) -no sin soportar el disgusto de la Marina de Guerra que los reclamaba-.
Originalmente el esquema de pintura de los Gloster era en color plata y a este esquema se les agrego la matricula del 1 al 100 de manera correlativa con la letra I -de intercepción-. Este esquema se mantuvo por varios años hasta que la FAA renovó sus aviones. Allí se cambió su uso a “ataque a tierra” (Caza) por lo cual se los repintó con un diseño de camuflaje y se los re-matriculó con la letra C. Argentina los desprogramó en los 70´s y pasaron a ser utilizados como monumentos o para prácticas educativas.
El neuquino:
Don Ángel Mendaza –un recordado Jefe de Aeropuerto de carrera- sabiendo el nuevo destino de estos históricos aviones habría participado de gestiones ante la Fuerza Aérea Argentina para acceder a una unidad. Esto, en función de decorar la entrada de la nueva terminal aérea del Aeropuerto a la usanza de la época. El Gloster neuquino fue aceptado como parte del patrimonio provincial por Felipe Sapag mediante el Decreto 112 del 22 de enero de 1975. Allí figura como único dato sobre la aeronave su supuesta matrícula (C-093) ya que se omitió el número de serie de la aeronave. Consultados algunos investigadores de aviación, el Gloster neuquino no sería el C-093 sino el C-099 ya que el C-093 habría tenido otro destino. Nadie pudo explicarme exactamente el motivo del supuesto cambio de matrículas, hasta que tuve años más tarde, el mismo hijo de Don Ángel, Jorge Mendaza –otro recordado aeronáutico neuquino-, me comento que el Gloster llegó desde Córdoba luego de ser repintado para lograr mejor su cometido. Durante el proceso de embellecimiento se le habría incluido la Matrícula ficticia C-093 en lugar de la original.
El Gloster C-099 llegó a la Argentina el 11 de mayo de 1949 con 0 horas de vuelo y estuvo al servicio de la Fuerza Aérea Argentina hasta el 31 de diciembre de 1971. Imposible no señalar que desde su colocación, solo tuvo un pequeño mantenimiento de pintura en los 2000 y fue allí cuando se lo “re-matriculó provincialmente” con el actual C-071. El estado actual del monumento es más que deplorable, no solo por el paso del tiempo sino por el vandalismo sufrido. Lejos de intentar hacer una apología militarista creo que el Gloster nos recuerda a todos muchas cosas de la historia –buenas y malas- y deberíamos conservarlo de otra manera. Por lo que es mi deseo –y me animo a decir que el de todos los que amamos la aviación- que a partir de estas breves líneas las autoridades que correspondan tomen dimensión del valor patrimonial del mismo y hagan lo necesario para su mantenimiento y puesta en valor.
¿Participó en la Masacre de Plaza de Mayo?
Aquel 16 de junio de 1955, día infame si los hay en la historia argentina, a las 12:40 hs 30 aviones de la Marina de Guerra (22 AT-6 Texan; 5 AT-11 y 3 Catalinas) bombardeaban y ametrallaban Plaza de Mayo. En la base de la FAA en el aeródromo de Morón -mientras existían acaloradas discusiones para sumarse o no a la rebelión contra el gobierno constitucional de Juan Perón- cuatro Gloster despegaron para repeler a los rebeldes marinos. El desigual combate aéreo –por la diferencia tecnológica entre los tipos de aviones- terminó con un AT-6 dañado y otro derribado. Esto quedó en la historia de la aviación ya que fue el 1º derribo de un jet en el continente americano y el verdadero bautismo de fuego de la Fuerza Aérea Argentina.
Mantenimiento del Gloster Meteor en el aeropuerto neuquino. Fotos enviadas por Fernando Vázquez.
Mientras eso sucedía, la discusión –a puro tiro y opereta- fue ganada por los pro rebeldes que en gran parte eran oficiales mientras que la sub-oficialidad castrense se resistió (es bien conocido el filo peronismo de la sub-oficialidad en las 3 fuerzas armadas). Aquel grupo vencedor se hizo de varios Glosters –incluyendo los 4 que habían peleado con los marinos- y luego de prepararlos (se les cargó combustible y se los armó) se sumaron a la revuelta ametrallando distintos puntos de la Capital Federal.[1] Todo termino horas después con varias de las aeronaves exiliándose en Uruguay. Los Glosters que participaron eran el I-019, I-029, I-031, I-032, I-036, I-039, I-049, I-052, I-058, I-063, I-064, I-077, I-090, I-094, I-095 y el I-098,[2] por lo cual está casi descartado que el Neuquino haya participado de la inaudita, trágica y condenable masacre fratricida que terminó con 308 muertos y más de 700 heridos[3] [4]
[1] Los Gloster no tenían capacidad de llevar bombas.
[2] Gloster Meteor FMKIV en la Fuerza Aérea Argentina. A. Marino, J. Mosquera, G.Gebel, V.Cettolo, H.Clariá y G.Posadas.
[3] En base a lo relatado por Horacio Rivara en su trabajo “Ataque a la Casa Rosada” La verdadera historia de los bombardeos del 16 de Junio de 1955.
[4] Puede que algún componente de nuestro Gloster haya sido parte de otro que si haya participado de las acciones del 16 de junio. Esto se explica en la política de “canibalismo” que se practicaba para reparar los diferentes aviones.
Más Neuquén es una publicación declarada de interés por el Congreso de la Nación (355-D-20 y 1392-D-2021 / OD 391) y la Legislatura del Neuquén (2373/18), por su aporte al conocimiento e historia del Neuquén.
Artículo escrito para Más Neuquén por Diego A Wonham: Controlador de Tránsito Aéreo, Controlador de Tránsito Aéreo Radar y Supervisor de Servicios Aeronáuticos. (CIPE) Considerado administrativo en la ANAC Neuquén fue finalista del concurso público en la historia para ocupar el lugar Argentino en la Air Navigation Commission de la OACI en Montreal Canadá en el año 2017 –concurso cancelado-. Es además Licenciado en Turismo egresado de la Facultad de Turismo de la Universidad Nacional del Comahue, y autor del libro “TAN. Alas neuquinas para la integración regional”
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