Década de 1930 en Plaza Huincul (Nqn), los señores Carlos Cáceres Bertodano y Héctor Cubitto firman un contrato ante la presencia del señor Juez de Paz Milton Chaneton.
Para ubicarnos en el contexto histórico, diremos que la gobernación del Territorio del Neuquén estaba a cargo del señor René Lawson, el presidente de entonces era Agustín P. Justo presidente de facto de la llamada década infame. Corrían los primeros años del descubrimiento del petróleo en Plaza Huincul y en esta “travesía” de soledad, viento y arena, con escasez de todo tipo, se iban asentando familias de trabajadores del petróleo y comerciantes emprendedores venidos de distintos lugares a esta zona inhóspita.
“Contrato privado”
“Entre don Carlos Cáceres Bertodano, argentino, casado, mayor de edad domiciliado en esta localidad, por una parte, y don Héctor Cubitto, argentino, soltero, mayor de edad, también domiciliado en esta localidad el señor Cáceres Bertodano, en su carácter de propietario de un negocio de tambo ubicado en los lotes fiscales número veinte y veintiuno de la sección quinta del Departamento Confluencia, le cede a don Héctor Cubitto con todas sus existencias detalladas en inventario… el señor Cubitto se compromete formalmente a mantener en condiciones de higiene y conservación en que recibe el tambo… bajo tales conceptos, las partes dan por formalizado este convenio a un solo efecto en Plaza Huincul, a los cuatro días del mes de Octubre de mil novecientos treinta y siete… Firma: H. Milton Chaneton – Juez de Paz”.
Don Héctor Cubitto no solamente mantuvo en condiciones de higiene y conservación el establecimiento, como quedo escrito en el contrato, sino que como joven emprendedor y productor ganadero hizo crecer ampliamente el tambo, trabajando diariamente, produciendo leche, manteca y queso, que con sus empleados repartían a domicilio. Abastecían al Hospital de YPF, a las comunidades de los Campamentos Central, Campamento Uno, Campamento Tres, Dadín, el Barrio Latino que a partir de 1950 pasó a llamarse Villa General San Martin.
Entre la clientela de don Héctor estaban las familias pioneras del comercio que como él apostaron en aquellos años al desarrollo de nuestras comunidades levantando sus precarias viviendas y salones para negocios en tierras fiscales al sur de las vías del Ferrocarril.
A partir de la creación de la primera Comisión de Fomento de Plaza Huincul el 24 de abril de 1966, los vecinos de esta población de 650 habitantes (la población a la vera de la ruta sin contar Campamento Central ni Campamento Uno), comenzaron la escrituración de sus tierras, después de varios años de lucha para conseguirlas.
Aquí, algunos clientes del tambo de apellidos muy conocidos de esta zona: G. Sánchez – Castellano – Rioja – Antoniana – Rivadulla – Avilés – Galbato – Pradilla – Bogniani – Lúpica – Moreno – Potenzoni – Adobatti – Miralles – Salto – Cavilla – Deimundo – Benente – Mérida – el Hotel “Plaza” y otras familias que figuran en el libro histórico de registro de clientes tan bien conservado por los hijos de don Héctor.
El “Tambo Cubitto” como lo llamaban los pobladores de Plaza Huincul y alrededores, en realidad era “Las Overas” como nombre comercial, poseía un tanque australiano, un jagüel y varias vacas overas lecheras.
En el ex tambo Cubitto se llevaron a cabo algunas escenas de la Película “Plaza Huincul (Pozo Uno)”, que fuera la primera producción de cine a nivel nacional en la provincia del Neuquén y se estrenó en el mes de Julio de 1960 en el viejo Cine “Petroleum”. La Dirección de la misma estuvo a cargo del entonces reconocido cineasta Lucas Demare, sobre el guión de Sixto Pondal Ríos quien fuera asesorado por el Ingeniero Enrique Cánepa para el argumento del film.
El otro hecho importante ocurrido en estos lotes fue, en 1989, cuando los restos del Argentinosaurus huinculensis fue hallado y denunciado por el señor Guillermo Heredia, puestero de aquellas tierras donde estuvo asentado el tambo “Las Overas”.
Don Héctor Cubitto en 1948 se muda al paraje “Cabo Alarcón” donde prueba con unas tierras sobre la costa del Rio Limay sembrando papas. En este paraje estuvo solamente dos años, luego se traslada a Neuquén y compra la chacra en bruto que luego empareja.
Aquí en Neuquén contrae enlace con la joven Adelina Cabrera, de cuyo matrimonio nacieron sus hijas Ester y Graciela e hijos Néstor Edgardo y Eduardo. A ellos el agradecimiento del aporte de fotografías y documentos de su padre, don Héctor Cubitto.
Del que no se conocían dato alguno es del señor Carlos Cáceres Bertodano, hasta que surge de un expediente de quince páginas, con fecha 24 diciembre de 1932, una carta dirigida al señor Administrador del Yacimientos Petrolíferos Fiscales de Plaza Huincul, Ing. Francisco Rapallini, respecto al programa de abandono del pozo N.C.1 (Pozo de exploración Covunco) firmada por el Inspector Nacional de Minas, Sr. Carlos Cásares Bertodano. Con este documento pasamos a saber algo de la vida laboral de éste último.
Carlos Ortiz (ortizcarlos1952@gmail.com)
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Artículo escrito por Carlos Ortiz (Plaza Huincul) para Más Neuquén
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Hola quisiera saber , como se llama hoy . COSTA LIMAY , QUE SE LLAMABA SI EN 1930 . muchas gracias