Eran las fiestas del año 1969, cuando un pequeño de 6 años abría ansioso sus regalos de reyes. Como todo niño en esa situación, arrancó en cuestión de segundos el papel de regalo que envolvía tan prolijamente aquel par de patines. Ese día comenzó una historia que lo llevó a recorrer el mundo. Una historia que lo llevó a competir contra los mejores, y ganarles.
José Luis Lozano comenzó a patinar casi de casualidad. Le habían regalado esos patines y los tenía que usar. Las calles de tierra de la ciudad de Neuquén mucho no ayudaban, por lo que debía buscar un buen lugar para poder hacerlo con mayor facilidad. Fue así como de a poco fue ganando destreza sobre las 8 ruedas del par de patines.
Cuando tenía diez años fallece su padre. Nunca pensó en competir hasta la aparición de Benito Segura, un enfermero que comenzó a entrenar a un José Luis de tan solo 12 años. Por esos tiempos, los domingos se realizaban carreras de patines en el colegio Don Bosco, escuela que ya contaba con un equipo propio de patín. Por lo tanto Benito decidió crear otro equipo, el de la Asociación Española, equipo que se convirtió rápidamente en rival del domingo del equipo del Colegio Don Bosco y contra el cual se comenzó a competir.
“Como yo hice toda la primaria en el Colegio Don Bosco, tenía una mezcla de los dos, porque además mis padres y mis tíos eran presidentes y autoridades de la Asociación Española, pero finalmente seguí representando a la asociación” afirmaba José Luis.
Su habilidad sobre las ruedas se hacía cada vez más notoria. Lo que empezó como un juego se estaba volviendo cada vez más serio. Sin embargo un hecho cambió la historia de todas las personas que entrenaban patín carrera en la provincia: la inauguración de la pista de la Asociación Española. Esto representaba el primer patinódromo de la provincia, y el segundo del país (el primero estaba en Mar del Plata). La asociación abrió clases de patín. Y muchos chicos y chicas se anotaron. El patín comenzó a hacerse un poco más popular en la región. Aun así todavía faltaba lo mejor.
Fue en el año 1981, cuando José Luis tenía 17 años, que comenzó una nueva etapa de su vida. Su nivel era muy bueno, y tenía que medirse con otros patinadores igual de buenos. Con esa edad debía correr en una categoría profesional. Benito decide organizar un campeonato Argentino de patín en nuestra ciudad. José Luis ya había ganado dos.
Vienen varios patinadores a competir a Neuquén. Viene el entrenador del seleccionado nacional. El entrenador es de Mar del plata, al igual que todo el seleccionado. No hay nadie de otro lado. Entre los competidores también hay 2 campeones mundiales. Patinadores profesionales. Patinadores con títulos. Pero nada de eso logró intimidar a este neuquino que contaba ya con algunos títulos nacionales.
Se prepara. Se entrena. Y pasó lo que quizás no era tan esperado. José Luis los venció a todos. Incluso a los campeones mundiales. Enseguida lo quisieron en el seleccionado y se lo llevaron 3 meses a vivir a Mar del Plata. Para noviembre de ese año, estaba compitiendo su primer campeonato mundial en Bruselas. No le fue tan bien. Deberá probar suerte en el próximo mundial, el cual se realizaría dos años después en nuestro país. Aun así sigue compitiendo y para fin de año logra 7 títulos nacionales y 3 sudamericanos.
Se esfuerza, se mentaliza, y en el año 83 logra salir campeón del mundo. Neuquén era una fiesta. El patín se volvió más popular. Se comienza a promocionar el deporte y se comienzan a construir muchos patinódromos, a tal punto que se llegan a tener siete solo en Neuquén capital, quizás la única ciudad en el mundo con tantas pistas de patinajes juntas.
Siguió representando a la Argentina en el Mundial del Colorado en 1985, en el Mundial de Australia en 1986…, hasta que llegó 1987.
En los juegos panamericanos de Indianápolis, en una actuación espléndida y consagratoria, demostrando velocidad y resistencia ante el fuerte equipo de Estados Unidos, local y favorito, obtiene cinco medallas de oro. Fue campeón en 300, 5000 y 10.000 metros, en la maratón de 20 kilómetros y en la carrera de relevos de 10 kilómetros.
La noticia corrió con un reguero de pólvora en la sala de prensa: «Un argentino ganó cinco medallas doradas». ¿Cómo se llama y en que deporte?, preguntaban los periodistas. Pocos presenciaron su hazaña, pero ocupó la primera página de todos los diarios de América.
La clave de su éxito, aparte de su gran esfuerzo, estuvo en correr con sus ruedas y no comprarles otras a los norteamericanos por 100 o 200 dólares como hicieron sus compañeros: “En una gran lucha interna, decidí no comprarlas porque había traído de Neuquén un bolsito con ruedas de distinta dureza, altura, espesor. Todas usadas, pero que conocía muy bien porque eran mías”, le explicó al diario La Mañana de Neuquén años mas tarde.
Participó en el Mundial de Italia en 1988 y en el Mundial de Nueva Zelanda 1989. Ganó más de 40 medallas de oro en su carrera, fue premiado varias veces por su trayectoria y elegido por la prensa como uno de los 3 mejores deportistas argentinos del año 87 junto con Maradona y Gabriela Sabatini, recibiendo el Olimpia de Plata.
A partir del nacimiento de su hijo, ya no se sentía igual de cómodo al viajar a otros países, estar 2 meses entrenando, para volver y entrenarse de nuevo para viajar a otro lugar.
José Luis Lozano le dijo adiós al patín carrera en 1994 con 30 años, cuando apareció una bota de cuero aerodinámica con cinco ruedas en líneas que marcó una bisagra en esta disciplina. La técnica del corredor cambió por completo.
La gran actuación que cumplieron José Luis Lozano y Rosana Sastre en los juegos panamericanos de Indianápolis llevó al Concejo Deliberante de la Ciudad de Neuquén a instituir el día 12 de Agosto como el “Día del Deporte de Neuquén”, en recordación a los logros alcanzados por ambos.
Más Neuquén es una publicación declarada de interés por el Congreso de la Nación (355-D-20 y 1392-D-2021 / OD 391) y la Legislatura del Neuquén (2373/18), por su aporte al conocimiento e historia del Neuquén.
Basado en el texto de Historias de bitácora
Otras fuentes: Argentina amateur , Diario La Nación
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