En 1904 dos decretos involucraron nuevamente el ordenamiento territorial y la designación de autoridades, conforme a la idea del entonces gobernador del Territorio, Carlos Bouquet Roldan. Por un lado, proyectó y llevó adelante el traslado de la capital del Territorio a la Confluencia, punta de rieles desde 1902 del FF. CC. Sud. En segundo lugar, y acompañando dicho traslado, estimuló la subdivisión del territorio en doce departamentos con las respectivas sedes de sus autoridades.
Aluminé se convirtió entonces en el Departamento IX (así denominado), y sus autoridades se establecerían en el “paraje Ruquechoroy” [sic]. Allí funcionaba la balsa de Miguel Muñoz ya desde 1903, la que había sido autorizada “sobre el Río Aluminé en el paraje denominado Rucachoroy”. Fue nombrado juez de paz don Antonio Luissoni, quien venía de ejercer la misma función en Nahuel Huapi. La comisaría comenzó a funcionar desde el 31 de marzo de 1905 en un local de propiedad particular, cedido gratuitamente por la estancia Pulmarí, y el contrato era por 3 años.
Desde fines de 1905 el denominado paraje Ruca Choroy fue asiento de las instituciones del departamento Aluminé: juzgado de paz y registro civil, comisaría y escuela. El Estado estaba más cerca. El paraje Ruca Choroy, capital del departamento, estaba a orillas del río Ruca Choroy Abajo, denominación que se daba a la confluencia del río Ruca Choroy con el río Aluminé.
No es equivocado pensar que ese lugar serviría como asiento para los organismos representantes del Estado. En la zona que es hoy Aluminé sin dudas había población que vivía o estaba en tránsito, aunque no habría sido ese el solo motivo que impulsó a la autoridades territorianas a emplazar allí un juzgado, una comisaría o una escuelita. Si bien la preocupación del Estado existía, no se puede saber cuánto de genuino era el interés por “ordenar” el departamento y cuánto de presión por la tierra pública que comenzaba a escasear.
Por ejemplo, en 1909 los pobladores Eduardo Beovides y Salomé Ulloa tenían noticias de que se podría llegar a ordenar la construcción de edificios públicos en la franja fiscal que arranca del río Aluminé y continúa por el arroyo Poi Pucón. Por ello, previendo esta situación, iniciaron las gestiones ante el Gobernador para la compra de esa tierra.
Las intenciones se manifestaban. El Gobernador intentó desde 1910 construir un local para la Comisaría, y en 1912 solicitaba:
[…] la reserva con fines de utilidad pública de una fracción de campo fiscal existente en lote 20 secc. C de zona andina. Comprendida entre límite del lote 19 y concesión de 2.500 ha hecha en lote 20 al Sr. Cristian D. Gonbert [Joubert]. En aquella región ha sido enajenada o arrendada la tierra fiscal, en donde podrían ubicarse convenientemente las autoridades del Departamento Aluminé, cuyas oficinas funcionan hoy en locales de propiedad particular, dentro de los campos de los establecimientos ganaderos establecidos, y hay manifiesta conveniencia en reservar con ese destino la fracción de campo que menciono, cuyo frente sobre el Río Aluminé la hace adecuada para la instalación de la Comisaría, Juzgado de Paz y Escuela de aquella jurisdicción.
Para 1912, en el lote 19 sección C- zona andina, que había sido arrendado a don Francisco Díaz López, estaba el negocio de Luis Jáuregui, encargado de las tierras. La casa era de piedra, y una de las mejor valuadas de la época y del departamento. Este lote 19 se extendía desde el río Ruca Choroy por el norte y una línea recta entre el Paso de los Manzanos y el lago Ruca Choroy por el sur.
Cruzando el río por el Paso de los Manzanos, estaba el lote de Francisco Huguet cuyo encargado era Abelardo González. Allí había un molino completo con una cantidad importante de trigo en cultivo. Y allí también su propietario había hecho construir un edificio para escuela, que donó al Consejo de Educación. Era una gran pieza de quince por cinco (15 m x 5 m), de palo a pique embarrado, una gran galería de unos dos metros, el techo de chapa, dos puertas y cuatro ventanas. En 1912 allí funcionaba, pues, la escuelita de la zona.
En 1913, el gobernador continuaba delineando su propuesta e insistía con la construcción de los edificios administrativos, especialmente de la comisaría y del juzgado de paz, ya terminado el edificio escolar, y expresaba: “Para dirigir y vigilar la construcción e inversión de fondos, podría nombrar una comisión de vecinos caracterizados del Departamento, que han ofrecido su patriótico concurso”.
El reordenamiento de 1915
En este marco de lento corrimiento de las humildes oficinas de la administración que el Gobierno territoriano venía gestionando, el Poder Ejecutivo nacional reordenó, una vez más y definitivamente, la división departamental. El Territorio Nacional del Neuquén tendría 16 departamentos. Se redujo el territorio del departamento Aluminé y cambió el asiento de su capital, dejando de ser el “paraje Ruca Choroy” para ser Aluminé.
Las gestiones del gobernador Elordi estaban influidas por el crecimiento de la población, por la privatización de las tierras que estaba sufriendo la región y también por la propia presión de los dueños de los locales donde funcionaban las instituciones departamentales.
Es así que el mandatario hizo efectiva la reserva de superficie para pueblo el 22 de agosto de 1914; con este cometido se trasladarían los organismos locales desde una tierra privada hacia una tierra pública. Y con el decreto del 20 de octubre de 1915, quedó reordenado el Territorio del Neuquén, incluidos los límites del departamento Aluminé y su capital. En ningún lugar de esta última norma legal se alude a la fundación del pueblo. Con estas actuaciones administrativas se logró frenar la privatización de las tierras, porque allí funcionaría un “pueblo”, y se estableció a Aluminé como capital del departamento.
Todo esto era virtual, estaba solo en los papeles, ya que durante varios años la frontera entre lo público y privado fue confusa. Las oficinas públicas siguieron funcionando en terrenos privados mientras se construían los otros. En noviembre de 1914, el juzgado de paz, que funcionaba en el negocio de Jáuregui y Cía. (en el lote 19) se trasladó al lote 20, ya reservado para pueblo, pero se dice que funcionaba en la casa de Juan de Dios Salas, un poblador del lugar, aunque otros testimonios lo ubican en el lote 19 hasta bien entrados los años 20.
Más Neuquén es una publicación declarada de interés por el Congreso de la Nación (355-D-20 y 1392-D-2021 / OD 391) y la Legislatura del Neuquén (2373/18), por su aporte al conocimiento e historia del Neuquén.
Extraído del libro: Historias de Aluminé – Voces de nuestra tierra – autores: Valentín Carignano – Carolina Desteffaniz – José Girini – Jorgelina Grilli – Monica Maté – Pablo Medina – Titi Ricciuto – Giovanna Salazar Siciliano – Elías Temi . Editorial Educo.
¿Te gusta la historia neuquina? ¿Tenés algo que contar o compartir y querés colaborar con Más Neuquén? Entonces hacé Click Aquí
También podés ayudarnos compartiendo este artículo en las redes sociales.