¿Cómo se preparaba Neuquén a mediados de agosto de 1904 para inaugurar la capital?
Construir, demarcar calles, formular programa, comisiones y presupuestos, dar con proveedores apropiados y encarar gestiones. ¿Dónde comprar confituras, champaña y pirotecnia? Mucho para el gobernador y un puñado de funcionarios. ¿El alojamiento? escaso, precario, y hasta indecoroso. Incompatible para figuras del gobierno nacional y congresales para quienes mejor sería llegar, pasar ese día y retornar a Constitución. En caso contrario, usar la formación de vagones y dormitorios del FC Sud como hotel. Los pobladores rurales acamparían para los festejos populares: asado con cuero junto al puente de hierro del FC Sud (Ferro Carril Sud), cuadreras, ejercicios de tiro sobre islotes y hasta regatas de bogadores. El gobernador Bouquet Roldán ultimaría detalles en Buenos Aires en un viaje relámpago. Habilitó las oficinas del chalet el 18 de agosto y el 24 partió. La Comisión de Festejos (como la llamó el enviado de Caras y Caretas a la inauguración) cursaría invitaciones, coordinaría el programa, dispondría la ornamentación con banderas en la estación, el Chateau y en la avenida República (finalmente Argentina) y urgiría la construcción de los galpones municipales y la cárcel. A los obreros mensualizados de la gobernación -el albañil Jorge Bustos, el carpintero Juan Fonza, el herrero Francisco Rubio y los peones Julio Ramírez y David Roa- se sumó un numeroso plantel. Los percances resultaron secuela negativa de la mudanza. El traqueteo de los carros, por ejemplo, rompió la prensa de los libros copiadores. La reemplazó otra encargada a la librería J. Vázquez y Cía de Buenos Aires por 29 pesos, más 11,90 por el flete del FC Sud.
Se completó el botiquín de emergencias por 885,05 pesos contabilizados en julio, suma girada al apoderado del territorio en Buenos Aires, Antonio S. Torino, por el listado de medicamentos que remitió al boticario y enfermero de la gobernación, C. C. Loustouret (Expte. 3440 -M° del Interior – 1904 – A.G.N). Torino satisfizo consultas, encargues y compras menores, como acuñar tres medallas conmemorativas a entregar en el acto y comprar 3 banderas argentinas (luego se encargaron 4 más).
Concluido el chalet de la gobernación, se le agregaron muebles presentables de los traídos desde Chos Malal. En Buenos Aires se compró lo elemental. De la casa Augusto Jousch, se adquirió un escritorio “ministro” por 36 pesos y en JM y Cía, una mesa de cedro, otra de tea y un escritorio, todo por 37 pesos. Seis salivaderas en Gath & Chaves (13,20) y otras seis en Trevino y Cía., que también proveyó un lavatorio y 24 sillas (137 pesos en total). El resto del mobiliario se encargaría después de la inauguración.
John Wrigth y la publicidad
El chalet portátil de madera para hogar y oficinas del gobernador, fue armado en 5 semanas. La Nueva Provincia (LNP) consignó -el viernes 8 de julio- que había comenzado la construcción en la que trabajaban “35 carpinteros” y otros tantos operarios y peones se ocuparon de tareas urbanas, entre ellas la prioritaria avenida; que “…da frente el chalet de gobierno”. Dos días antes de la inauguración de la capital -sábado 10 de setiembre-, el diario La Nación señaló que “ha sido aprobado por el Poder Ejecutivo el gasto de 9600 pesos efectuado en la construcción de la casa que ocupa el gobierno del Neuquén, en la nueva capital del territorio, cuyo abono hará el Ministerio de Hacienda a don Juan Wrigth. Advierte el decreto que no pudieron llenarse en este caso las exigencias de la ley de contabilidad, considerando la necesidad urgente del edificio y la lejanía del punto en que debía construirse”.
El precio de la compra e instalación del Chateau Gris lo anticipó el gobernador al ministro del Interior por nota del 20 de agosto, adjuntándole las “cartas contratos”. El contenido de la nota ya fue exhumado por Angel Edelman en su Primera Historia del Neuquén. Aquel informe resaltaba el ahorro conseguido para erigir el chalet:
1) el precio final acordado “quedó fijado definitivamente…después de la declaración hecha por la casa constructora de que haría la obra sin utilidad alguna, por ser ella para el Gobierno y porque cree que le serviría de reclame (por propaganda) ubicada como debía quedar a la entrada del Territorio”;
2) se consiguieron rebajas para los pasajes en tren de 21 operarios,
3) hasta 100 toneladas de materiales para esa obras consiguió el gobernador el transporte de gracia del FC Sud, economizando 3500 pesos.
4) el acarreo desde la terminal ferroviaria hasta el lugar de la construcción, fue contratado a la mitad de su valor;
5) debía considerarse el valor del terreno, que era donado.
Bueno y prestigioso
Un mínimo comité gubernamental para lo protocolar de la inauguración fue urdido por Emilio Rodríguez Iturbide, mientras que la Comisión de Festejos quedó presidida por el malagueño Francisco Bueno, reconocido padre de familia que hacía honor al apellido y el más antiguo agente comercial en el lugar -desde cuatro años antes- como representante de J. M. Méndez y Cía. de Bahía Blanca.
Secretario fue Arsenio B. Martin, agente de cargas y comisiones de Augusto Grobly, representante de la porteña casa Lanusse asociada con Olaciregui en Bahía Blanca. Martin también escribía en La Nueva Provincia.
Pedro Linares, el tesorero de la Comisión, administró las donaciones.
En 1902 se puso al frente de La Nacional, almacén (y boliche) de ramos generales de Varela, Linares y Cía. (socio de Casimiro Gómez) anexo del Grand Hotel regenteado por Hipólito Briones. Linares atendería a los periodistas enviados desde Buenos Aires y Bahía Blanca.
El aragonés Pascual Claro encabezó el listado de vocales de la misma Comisión. Era juez de paz del lugar desde 1900 y un potentado, ya que distribuía en concesión la correspondencia al interior territorial (por 27.000 pesos anuales) y estaba asociado con Domingo Mazzoni en la flamante fábrica de ladrillos. Le seguía el jefe del correo Mateo Etchegaray, el comisario José Belindo López, el jefe de la cárcel José María Pérez, Eduardo Arizzi y Enrique Carro.
José Bruguera no figuró, pero sería el orador a nombre de la Comisión en el asado popular (al tiempo Martin fue encarcelado 2 años y sobreseído; Pascual Claro murió en 1908 y su viuda -Eleuteria Guerrero- se casó con Doroteo Plot, ex primer comisario del lugar).
Las dos primeras donaciones a la Comisión resultaron suculentas: 500 pesos de Casimiro Gómez y otra que mereció el eco “de halagüeños comentarios (por) la actitud generosa del señor David Spinetto, suscribiéndose desde Buenos Aires con 500 pesos, pues a pesar de no ser vecino de aquí (telegrama de Neuquén a LNP) porque sus campos están en Arroyitos, ha querido significar su adhesión…”
Más Neuquén es una publicación declarada de interés por el Congreso de la Nación (355-D-20 y 1392-D-2021 / OD 391) y la Legislatura del Neuquén (2373/18), por su aporte al conocimiento e historia del Neuquén.
Publicado en el Diario Río Negro, el 11 de Julio del 2004. Artículo escrito por Francisco Juárez.
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