El oro negro – Neuquén y el petróleo (parte 2 – última)

Entre 1927 y 1935 no se descubren nuevas estructuras, hasta que en marzo de este último año se ubica el yacimiento Bajo los Baguales, en 1938 Avanzada Norte y Minas Chita; por último, Senillosa en 1940 y Loma Negra al año siguiente. La baja producción de los yacimientos ponía en peligro la existencia de la Administración Plaza Huincul. Cuando YPF estaba pensando en levantar la Administración en Neuquén, encuentra petróleo en Challacó (diciembre de 1941) -cercano a Plaza Huincul-, con lo que no solo pudo continuar con la producción, sino que también fue estimulada a intensificar la exploración, cuyos efectos positivos no se harían esperar. Todo ello redundó en beneficio no solo de YPF sino también de los pueblos de Plaza Huincul y Cutral Co que dependían de los servicios que demandaba la explotación de petróleo. La cuenca neuquina ofrecía nuevos yacimientos. En abril de 1952 se localizó el importante yacimiento de Cerro Bandera, situado a 30 km al oeste de Plaza Huincul. Este depósito alcanzó hacia 1954, en recuperación primaria, una producción de 1.500 m3/día, decayendo posteriormente. Cuatro años después la empresa realiza el hallazgo del El Sauce, anticlinal ubicado a 85 km al sudeste de Huincul, y poco después se localiza la reserva gasífera de Sierra Barrosa, a 75 km al noroeste de la ciudad de Neuquén.